¿Humillado o ayudado?

Ayer domingo, sin excepción, todos los sevillistas se levantaron encantados con el entrenador que tienen en el banquillo de su equipo. El Sevilla dio una auténtica lección de fútbol en San Mamés, haciendo todo lo que hay que hacer para llevar a la desesperación a un rival en su propia casa. Eso es desde ayer, porque a pesar de las victorias consecutivas que se venían consiguiendo,  el «sevillismo criticón» veía esta etapa como en el programa de 50×15, es decir, si caía en uno de estos últimos partidos mostrando viejos fantasmas, perdería todo el crédito acumulado. El arahalense, sin embargo, parece haber llegado en Glasgow a la pregunta sin riesgo, y no será hasta el partido contra el Real Madrid cuando se volverá a crear el «runrun» si el equipo no muestra la actitud adecuada.

Pero hay algo que analizar en todo esto. ¿Qué hizo el Sevilla para convencer en Bilbao? Tuvo el balón, no tuvo como único recurso el balonazo en largo a Kanouté, se olvidó de tener atada a la estrella del adversario, fue desde el minuto uno a por el partido y cuando se quiso dar cuenta, quedaban 45 minutos y ya podía pensar en la Champions League. Y ahora digo yo: ¿Qué es lo que se le criticaba a Jiménez, ya se ganara, se empatara o se perdiera? No tener el balón, abusar del balonazo en largo al delantero, preocuparse más de controlar al equipo rival que de jugar, especular con el empate y confiar en las segundas partes.

¡Qué casualidad! Jiménez puso remedio a todos esos aspectos que se le criticaban y no fue criticado, es más, fue elogiado. Queda claro una vez más que si se juega bien los resultados no hay ni que buscarlos, llegan sin que nadie los llame. Pero claro, la prensa y los aficionados que no nos conformamos con el uno a cero ramplón y de rebote, lo único que queremos es echar al entrenador porque es de la casa, puesto que si se llamase Jimenov estaríamos muy contentos con él hiciese lo que hiciese… Pues no. La prensa y los aficionados que no nos conformamos con el uno a cero ramplón y de rebote, actuamos así porque sabemos que este equipo es capaz de meterle cuatro al Athletic en su campo y pasándole por encima del uno al noventa. ¿De verdad alguien piensa que la prensa o algún aficionado pediría esto a Jiménez si hubiese sido nuestro entrenador en tiempos de Caparrós? No hace falta responder.

En fin, que después de todo esto no me queda claro si achuchar continuamente a Jiménez ha sido un desprecio hacia su persona o por el contrario, la mejor ayuda que haya podido tener jamás. Esto es como el padre con el hijo. Si todo lo que hace el hijo está bien hecho a sabiendas de que se equivoca, probablemente éste acabe siendo un mediocre. Si por el contrario, dentro de sus posibilidades, el padre le exige siempre un poco más de lo que da su hijo, aunque éste no lo vea ahora, pronto se dará cuenta de que sólo le estaba ayudando a crecer.

Así que, Manolo, confiamos en ti para el partido de mañana en Glasgow. El domingo, en casa, yo no pido obligatoriamente resultados porque el rival es el que es, pero si la actitud vuelve a ser la de antaño, volveré a exigir más porque ahora sé que es la única manera de que acabe llegando.

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El club pone en marcha la semana de la afición

Ayer mismo vimos como, espoleados por su club y por la prensa local, los aficionados del Valencia dieron el 120% en apoyo de su equipo para ganarnos el partido. Está claro que si una afición metida de lleno con su equipo es clave, más aún ocurre con la nuestra y su tremendo potencial. En una, para nuestra opinión, magnífica iniciativa del departamento de marketing, se ha creado la semana del aficionado, que en realidad es un homenaje al abonado nervionense. De esta manera se han creado spots publicitarios, promociones y un sin fin de actos que se verán culminados con el partido del domingo ante el Real Madrid. Desde luego, va a ser para vivirlo.

Dado que el club lo detalla todo a las mil maravillas en la web oficial, os dejamos aquí tanto el video de presentación como el comunicado.

Los vídeos de Vodpod ya no están disponibles.

Comenzando por el principio, resulta muy destacable el servicio que a partir de este lunes se le brinda a los abonados en la Web oficial, donde encontrarán un rincón del socio en el que, entre otras cosas, podrán disponer de una cuenta de correo sevillista, de una oficina de atención al socio virtual o de un revolucionario sistema de búsqueda de trabajo, por el cual los abonados insertan sus currículums y el Club los envía a una serie de empresas que colaboran en esta iniciativa, denominada Sevijob. No obstante, es el apartado Tertulia de Nervión, el que más gusto dará a los socios, pues en esa sección podrán hacerle entrevistas virtual a sus ídolos, mandando sus preguntas que serán respondidas en directo por el personaje en cuestión, estrenando este novedoso servicio el presidente, que responderá a una selección de las cuestiones que se le planteen el jueves por la tarde.

Pero hay muchas novedades. Por ejemplo, que el próximo domingo, ante el Madrid, choque con el que se dará por finalizada la semana de la afición, los jugadores llevarán junto al escudo de la Entidad el número doce, en un claro gesto de agradecimiento por su apoyo a lo largo de toda la campaña, número que, como bien recordó Vizcaíno, se le concedió de forma simbólica a la afición del Ramón Sánchez Pizjuán por parte de la Real Federación Española de Fútbol por su inestimable apoyo a la selección nacional.

Además, habrá el domingo una edición especial de SFC Periódico que rendirá triubuto a la afición, así como se promoverá que la previa al choque tiña de colores sevillistas las inmediaciones de Nervión. Entre 20 y 25 bares cercanos al estadio servirán una tapa sevillista al módico precio de un euro, valiendo las cervezas también sólo un euro. Precios de ganga que también se podrán disfrutar en las barras del estadio, en la hora feliz que se habilitará de 17:30 a 18:30 horas. Un mosaico dinámico, un zepellin y muchas más novedades servirán para contagiar de alegría y orgullo a una afición que merece el sincero homenaje que el Club le quiere brindar en estos siete días.

Animar sí o sí

Como todo el mundo sabrá ya a estas alturas, ayer tuvo lugar la Junta General de Accionistas del Sevilla FC. En general, el desarrollo de la misma fue brillante porque no podía ser de otra manera. Los resultados deportivos, económicos y sociales de la entidad la han convertido en todo un fenómeno empresarial hasta el punto de que el caso «Sevilla FC SAD» se estudia ya en escuelas de negocio tan prestigiosas como San Telmo o Esade.

Hasta aqui, todo perfecto. Por contra , el discurso final del presidente confieso que me ha sorprendido un poquito al escucharlo hoy por la radio. Y me explico. En determinados momentos y en un tono de voz mas alto de lo necesario, José María del Nido reprocha a cierto sector de los aficionados una actitud excesivamente crítica con el equipo. Hasta el punto de declarar que «a veces me da vergüenza ver cómo se trata al equipo. Llevamos mas puntos fuera que dentro y eso es para hacer examen de conciencia. Es para que a alguno se le caiga la cara de vergüenza. Tenemos la obligación de apoyar, apoyar y apoyar. Vamos a empujar, vamos a animar».

Y digo que me sorprende por dos cosas:

1) porque en cierta forma se contradice con los mensajes que yo le había escuchado hasta ahora al presidente. Muchas veces ha repetido que; «la afición del Sevilla FC es soberana para lo bueno y para lo malo».  O esto otro «todo se puede cuestionar en el Sevilla FC con excepción de tres cosas; el escudo, la bandera y la afición».

2) porque creo que se equivoca cuando intenta relacionar la actitud de cierto sector del público con los malos resultados del equipo en casa. Pienso que esto último obedece mas bien al estilo de juego que imprime Jimenez y que funciona mucho mejor fuera, que no tiene obligación de llevar la iniciativa. El que haya soplado al presidente esta excusa vaga, le ha hecho un flaco favor.

Estoy 100% de acuerdo en que mientras que el balón esté rodando y haya puntos en juego, la única actitud válida debería ser la de apoyar a muerte a los jugadores y al entrenador. Pero cuando el árbitro pita el final del partido, cada cual es libre de expresar lo que opina y lo que siente porque para eso paga, y no poco por cierto.
Repito, si el sentido que ha querido darle es el de pedir apoyo incondicional durante los partidos, AMÉN. Si por contra pretende que la afición carezca de criterio propio y diga sí a todo antes, durante y después de los partidos, ya no estoy tan de acuerdo.

La afición del Sevilla es una afición que se ha caracterizado siempre por su independencia y por su capacidad de lucha.Y digiere muy mal actuar en manada, salvo que esté en peligro la institución. Gracias a ese espiritu inconformista fueron expulsados algunos presidentes que solo pretendían servirse del Sevilla, caso de Escobar y Caldas. Y gracias tambien a esa determinación se hizo justicia, devolviéndo al equipo a la categoría que por méritos le pertenecía en aquel verano fatídico del 95. Y es que a la afición del Sevilla no le gusta que le impongan las cosas aunque vengan nada más y nada menos que de D.José María del Nido Benavente, santo y seña de la época mas prestigiosa en la larga historia del club. Por cierto, las juntas de accionistas del Sevilla no fueron siempre tan plácidas. Para muestra un botón:

Cuando se ganaron tantos títulos a base de goles y de practicar un futbol de ataque y preciosista no hizo falta que nadie viniera a decir a los aficionados que debían apoyar al equipo. Ya se encargaba la afición de llevarlo en volandas. Por contra cuando,como el dia del Barcelona se ve a todo un estadio coreando el himno del centenario en los minutos previos y luego no se recibe a cambio lo que se espera, considero normal que haya gente a la que no le guste y está en su derecho de expresarlo.

Los administradores de este blog nos consideramos delnidistas y seguimos pensando que este presidente es y será por muchos años el mejor presidente de la historia de nuestro club. Porque ha logrado éxitos jamás soñados que le dan un crédito casi ilimitado a los ojos de la afición. Pero eso no quita que sea falible y que de vez en cuando pueda cometer algún desliz, sobre todo si está mal asesorado.

Dicho esto, tambien reivindicamos el derecho a expresar libremente lo que pensamos como rezan varios artículos  de nuestro decálogo y así lo hemos hecho.

Con este articulo no pretendemos crear un dogma de fe. Es más, nos gustaría conocer vuestra opinión al respecto de las declaraciones del presidente.