Hacer que Nervión se vuelva a convertir en nuestro feudo

Que el Sevilla es hoy en día un equipo que sabe jugar mejor fuera que en casa no hay quien lo dude. Ahora bien, a determinados rivales (léase Atlético de Madrid y Barcelona como últimos ejemplos) es difícil ganarles en su feudo se juegue como se juegue. Por ello sería aconsejable dejar de jugar a la ruleta rusa y apretarse los machos para que nuestro estadio deje de ser un mercado donde cualquier equipillo puede irse tranquilamente con los tres puntos en el autobús. Mientras que fuera de casa Jiménez tiene un plan que pocas veces falla, en casa no es capaz de plantear ninguno que funcione. Cualquier entrenador de cualquier equipo de mitad de tabla conoce que el Sevilla saldrá los 15 primeros minutos a por el partido, que a partir de ahí bajará el ritmo y que jamás utilizará el centro del campo sino que su único recurso es la entrada por banda y el centro desde línea de fondo.

Conocido todo eso, cualquier entrenador tapona bien las bandas, usa al mejor distribuidor que tenga en la medular y un par de contras le servirán para llevarse el partido. En esas llevamos desde el mes de octubre, pues las estadísticas del Sevilla como local son para hacérselas mirar al técnico.

De los últimos diez partidos del Sevilla en casa en las tres competiciones oficiales, en siete de ellos el rival de turno fue el encargado de romper el cero a cero inicial. De estos diez, únicamente el Espanyol y el Glasgow Rangers se fueron de Nervión sin hacer gol. En estos encuentros el equipo ha encajado un total de 12 goles y ha anotado 15, si bien es cierto que se incluyen los cinco endosados al Ciudad de Lorquí. El balance quinielístico es de 3 triunfos (ante Ciudad de Lorquí, Villarreal y Glasgow Rangers), 4 empates (ante Espanyol, Stuttgart, Málaga y Valladolid) y 3 derrotas que coinciden con los tres últimos duelos en el Pizjuán (Getafe, Racing y Barcelona).

Dicen los entendidos que los equipos regulares son aquellos que no sólo cumplen en casa sino que también dan la cara a domicilio. Está claro que para nuestro caso habría que darle la vuelta al dicho. De hecho, si tenemos en cuenta los diez últimos partidos lejos de casa nos sale un balance de 7 triunfos (Stuttgart, Ciudad de Lorquí, Xerez, Tenerife, Sporting, Barcelona en Copa y Deportivo en Copa) y 3 derrotas (Unirea, Atlético y Barcelona en Copa). Sin duda son datos reveladores que destapan al mejor Sevilla visitante de la última época, pero que también arrojan datos en casa tan negativos como ya no se recordaban. Almería es la primera parada para comenzar a darles la vuelta.

Anuncio publicitario

At. Madrid 2; Sevilla FC 1. Mal partido y peor resultado.

Reconozco que me ha costado poner en orden mis ideas para escribir una mínima crónica y aviso a navegantes de que estoy un pelín desmoralizado. Y es que no se puede calificar precisamente de buen partido el que hemos presenciado esta noche. El peor Atlético que hayan visto mis ojos y un Sevilla que no ha mejorado a los rojiblancos nos han ofrecido hoy un pobrísimo espectáculo, especialmente en la primera parte. Más parecía un partido de solteros contra casados que un envite de la liga BBVA con dos históricos en liza. La única ocasión mencionable de los primeros 45 minutos fue el gol sevillista, obra de Renato tras saque de esquina de Perotti.

Y si mala fue la primera en cuanto a juego, peor fue la segunda en el sentido de que no se pueden cometer más despropósitos en menos tiempo. Unos supuestos profesionales que ganan su buen dinero por dedicarse en exclusiva a jugar al fútbol no pueden cometer errores de principiantes como el de Duscher, que se ha autoexpulsado por no saber medir las entradas. Y no es la primera vez que deja a su equipo con diez por su mala cabeza. O el de Navarro, que en la última jugada del partido hace una falta totalmente innecesaria que a la postre siginificaría el 2-1 obra de Antonio López de cabeza. Repito, no es de recibo tirar por la borda un botín que teníamos cobrado al final del primer tiempo. Apenas hubiéramos controlado minimamente el partido nos habríamos traido si o si los tres puntos porque el At. Madrid estaba practicamente muerto. Nosotros, solo nosotros, le hemos dado aire al contrario con nuestros errores del TBO. Muy cabreado debería estar Jimenez con el comportamiento de sus jugadores, imprópio de un equipo de la zona alta de la primera división española.

Ya he mencionado a los dos principales culpables de nuestra derrota pero ahora paso a opinar del resto. Los dos centrales titulares hoy han estado muy mal. Squillaci ha perdido de vista dos veces el balón y la segunda de ellas nos ha costado encajar el primero. Aquí ha habido un mucho de mala suerte, ya que el balón rebotado en la pierna del francés, cayó a piés de Forlán que incomprensiblemente se echa el balón demasiado largo y Palop, que acertó a adelantarse al uruguayo lo hizo con tan mala fortuna que el balón rechazado rebota en el cuerpo de Drago y se cuela inmisericorde en nuestra portería. Si tuviera pelos me los habría arrancado en ese mismo instante.

Si hablamos del centro del campo, el tándem Duscher – Romaric ha estado lamentable. El primero no consigue terminar un partido completo, sea por lesión, sea por expulsión como el caso de hoy. Su compañero de línea Romaric sigue demostrándonos a todos que no es el centrocampista de creación que necesita este equipo si queremos ser realmente un grande. No sale del pase fácil al que tiene al lado y a girarse continuamente sobre sí mismo pero sin avanzar un solo metro. Su lentitud en la transición del balón le hace totalmente previsible y anulable.

Arriba, Negredo desacertadísimo. Me niego a aceptar que este hombre sea tan tronco como parece. Yo me confieso admirador del Negredo de la etapa del Almería pero este jugador parece otro. Hace cosas sin sentido, se precipita en las acciones y se le nubla la vista en cuanto se acerca al área. Su sustituto, Koné, no solo no lo mejora sino que resta recursos defensivos al equipo porque baja andando. Francamente no sé si es que este hombre es tan poco maduro como aparenta o realmente no da más. Le perdonaron la roja directa en los últimos minutos por una entrada impresentable en una zona del campo sin peligro alguno. Ni siquiera Adriano que no salió hasta el minuto 60 ¿? ha sido capaz de cambiar la cara desangelada del equipo. Una desaplicación suya en el marcaje a Antonio López nos ha costado perder dos puntos en el último suspiro.

Y para el final dejo al entrenador. No se puede jugar peor, Sr. Jimenez. El Sevilla ha perdido todo el empaque que mostró hasta la jornada ocho o diez. ¿Dónde ha ido a parar ese juego preciosista, descarado y valiente que puso sobre el campo a partir de la derrota de Valencia?. El equipo se limita ahora a jugar andando, arropadito atrás y buscando el gol en un contragolpe. El problema es que cuando en el campo no están Kanouté, Luis Fabiano y Zokora, la empresa se torna harto complicada. Nos guste o no, el Sevilla ha sacado adelante muchos partidos gracias a las individualidades que tiene. El problema no viene de hoy, en el que han faltado los africanos. Ya hace muchos domingos que iniciamos la cuesta abajo y la desmoralización parece haber cundido entre los jugadores. Lo de Sergio Sánchez ha sido un palillo pero no cómo para justificar el pésimo partido de esta noche. Con decir que hemos hecho bueno a un contrario que está en horas bajas, bajísimas, siendo Reyes su mejor hombre sobre el campo.

En fin, que nos queda que pasar tela hasta que vuelvan los monstruos. Lo siento pero estoy de bajón.

Jugaron: Palop (1); Konko (1); Squillaci (0); Dragutinovic (1); Navarro (0); Duscher (0); Romaric (1); Navas (1); Perotti (1); Renato (1) y Negredo (0). En la segunda participaron Adriano (0); Koné (0) y Lolo (sc).

Mucho sevillismo de ayer y hoy en la segunda edición del «Champions for Africa»

El año pasado se inició la andadura del partido Champions for Africa con la organización de Kanouté en el Ramón Sánchez Pizjuán y con la presencia de jugadores de todo el planeta. En aquella ocasión se aprovechó el final de la temporada, pero en en su segunda edición se disputará a las puertas de la Navidad, esta noche y en el Santiago Bernabéu de Madrid. El partido enfrentará a un combinado de futbolistas de la Liga BBVA contra otro de futbolistas africanos, reforzado, eso sí. Frederic Kanouté sigue siendo el máximo impulsor de la idea y de hecho lo recaudado irá destinado a los niños de Mali. Sin embargo, esta vez se ha volcado Sergio Ramos, uno de los ex-sevillistas que estará presente. Se podrá decir de todo en lo futbolístico tras la marcha del camero al Real Madrid, pero no se puede obviar que en lo personal su actitud es intachable. El partido comenzará a las ocho de la tarde y lo retransmitirá en directo La Sexta.

La lista de participantes es muy larga y la detallamos justo debajo, pero lo que más nos importa es la presencia de la plantilla nervionense en el estadio madridista. En este sentido, Álvaro Negredo y Jesús Navas tendrán minutos con el equipo de estrellas de la Liga BBVA, pero más presencia tendremos en el equipo africano. Además de Kanouté que ejercerá como capitán, estarán Zokora, Romaric, Koné, Konko (de origen marroquí) y Palop (que de africano tiene mucho menos que de solidario). Los ex-sevillistas Antoñito, Lauren y Makukula tampoco faltarán a la cita.

Entrenador: Luis Aragonés

Capitán: Sergio Ramos (Real Madrid)

Valencia: Moyá, Albelda, Joaquín, David Villa, Alexis, Marchena y Mata; Getafe: Codina, Miguel Torres, Celestini y Soldado; Sevilla: Jesús Navas y Negredo; Osasuna: Ricardo, Calleja, Juanfran, Camuñas y Portillo; Zaragoza: La Guardia y De Barros; Deportivo: Ze Castro y Bodipo; Villarreal: Javi Venta; Sporting: Botía y Gerard; Valladolid: Baraja y Borja; Xerez: Momo y Antoñito; At. Madrid: Cleber Santana; Real Madrid: Casillas, Arbeloa, Opare, Marcelo, Albiol y Granero; Athletic: Exteberría y Fernando Llorente; Espanyol: Callejón; Racing: Munitis.
Entrenador: Javier Clemente.

Capitán: Frédéric Kanouté (Sevilla)

Sevilla: Konkó, Romaric, Zokora, Koné y Palop; Xerez: Keita; Betis: Emaná; Barcelona: Keita y Touré Yaya; Zaragoza: Songo’o; Tenerife: Kome; Mallorca: Webo y Keita; R. Madrid: M. Diarrá; Valladolid: Manucho; Cádiz: Ogbeche; Chelsea: Essien y Obi Mikel, Kalou; Portsmouth: Lauren; Milan: Dida; Inter: Viera, Muntari y Joel Obi; Kayserispor: Makukula.

Sevilla FC 1; Getafe CF 2. Y van nueve.

Nueve son los puntos que hemos perdido en los últimos cuatro partidos en casa. Español, Málaga, Valladolid y Getafe se han llevado un botín demasiado cuantioso para las aspiraciones que se le suponen a nuestro equipo y para la escasa entidad de dichos rivales.

Los partidos del Sevilla en casa tienen un mismo patrón durante las dos últimas temporadas. Tiramos lastimosamente los primeros cuarenta y cinco minutos, -supuestamente en una estrategia de desgaste del rival-  arrancamos tras el descanso con tímidas incursiones hacia la portería contraria y acabamos los partidos completamente volcados a la búsqueda desesperada del gol si es que para esos momentos no hemos conseguido todavía mojar. La diferencia entre la temporada pasada y esta es que antes teníamos una solidez defensiva que parece ser, hemos perdido. Encajamos goles con una facilidad pasmosa. Hoy, una vez más, primera llegada del rival y  gol. Segunda llegada y nuevo batacazo.

Un tal Soldado se bastó para poner en evidencia a toda nuestra defensa y marcó los dos goles del Getafe. Si analizamos los componentes de la zaga sevillista, Konko dejó escapar al extremo que puso el centro del primer gol visitante tras taconazo errado de Kanouté que le puso el contragolpe en bandeja. Escudé acusó la falta de ritmo exhibiendo una lentitud exasperante, Sergio Sánchez no marcó adecuadamente a Soldado en el primero de la noche y Navarro  salió claramente derrotado en su duelo particular con Pedro León. Por cierto, vaya jugadón que hizo este hombre cuando el partido expiraba. Se fue de todo el que quiso y solo una intervención magistral del Palop evitó el tercero. En definitiva, suspenso absoluto de los zagueros sevillistas en una noche para olvidar.

Cierto es que llevamos una racha de lesiones que se está cebando especialmente en la zona de retaguardia pero no es de recibo que en los últimos cinco partidos como locales nos hayamos puesto con el marcador en contra a poco de empezar. Una cosa es aguantar el mal juego del equipo porque los puntos acababan cayendo de nuestro lado y otra bien distinta es jugar mal y además perder.

Siempre habrá quien diga que Perotti la tuvo a huevo para empatar y la falló solito. Y que el Getafe tuvo suerte en la indecisión entre Palop y Sergio Sánchez que nos costó el segundo. Sin dejar de ser cierto, se supone que un equipo que aspira a todo tiene que mostrar mucha más contundencia. Eso que llamábamos «pegada» pero que ahora no aparece por ninguna parte.

El juego sevillista es demasiado previsible y lento en las transiciones. Todos los equipos que llegan al Pizjuán saben que nuestros centrocampistas buscan siempre, si o si, a las bandas. Por tanto, si tapan a Navas y Perotti y además concentran gente en el área para despejar los centros que no consiguen evitar, tienen mucho ganado. Por ende, si cuentan con un tal Boateng (un Zokora con rastas con el dorsal 18) que ha hecho el partido de su vida, pues a morir por Dios. Este morenito ha despejado todo lo mandábamos al área. Impresionante.

Volviendo a los nuestros; si hablamos de Romaric, yo me sigo preguntando qué aporta este hombre al equipo. Soba tanto el balón que su capacidad de sorpresa es nula. Para mi , siempre  que Renato esté disponible, debe jugar. Porque andando, el brasileño es infinitamente más efectivo que el marfileño si tenemos en cuenta que la producción de juego interior de Romaric es inexistente. Si el club sigue con su miopía para no querer ver que falta un hombre organizador que dé descanso a Renato; mal vamos.

Otro que sigue sin demostrar nada en tres años que lleva aqui; Koné. No entiendo su titularidad de hoy. Yo lo habría sacrificado en beneficio de Renato. El problema actual del Sevilla es que consagra todo su poder ofensivo a las entradas por banda y por tanto Jimenez se siente en la obligación de jugar con dos delanteros. Pero si esos dos delanteros no son Kanouté y Luis Fabiano, mejor jugar con un solo punta y tres centrocampistas porque al menos se tiene la variante del juego interior.

 En los contragolpes del Getafe, se podían contar hasta cinco jugadores visitantes contra solo tres de los nuestros. Esa valentía es la que a mi me gustaría ver en mi equipo. No estoy inventando nada; lo tenemos bien fresquito en la memoria.

Revueltas bajan las aguas por el Pizjuán y algún que otro gesto de desaprobación en forma de música de viento se está repitiendo al final de los partidos. Y yo me sigo preguntando; ¿porque dejó el Sevilla de jugar como hizo durante no menos de cinco o seis partidos tras su derrota en Valencia? ¿Qué extraño fenómeno ha hecho que volvamos a caer en el juego mediocre y cicatero tras haber tocado la gloria rememorando tiempos no tan lejanos con Juande? Yo no lo entiendo. Manolo Jimenez ha dicho que conviene hacer autocrítica y ver porqué se tienen esos errores puntuales que están costando tantos puntos. Pero yo creo, que si el análisis se queda solo ahí, se está equivocando. Al margen de los errores, el Sevilla ha perdido el sello, aunque fuera el sello resultadista. Ahora vienen unos dias para descansar y hacer examen de conciencia.

Jugaron: Palop (1); Konko (1); Sergio Sánchez (2); Escudé (1); Navarro (1); Romaric (1); Zokora (2); Navas (2); Perotti (1); Kanouté (1) y Koné (1). También jugaron Negredo (1), Renato (1) y Capel (s.c).

¡¡ Felices Fiestas a todos los que visitais el blog y especialmente a los componentes de la ASRED !!

Sevilla FC 1; VfB Stuttgart 1. La relajación evitó el pleno al doce

Decía Manolo Jiménez nada más finalizar el partido, que no hay nada que reprochar a sus jugadores porque lo dieron todo para hacerse con los tres puntos de esta noche. Me parece muy bien que como técnico respalde la labor de sus pupilos, pero no hay más remedio que admitir que si un equipo es culpable del resultado desfavorable ese es el Sevilla. No me sirve como excusa la lesión de Duscher, que fue un contratiempo cuando faltaban fuerzas pero que de no haberse producido el premio hubiese sido el mismo. El Stuttgart es un equipo sin alma, prácticamente resignado a la destitución de su técnico. Da esa sensación de equipo que sabe que todo le va a salir mal pase lo que pase. De hecho, ni los balones al pie le salían en la primera parte. Prácticamente con el juego por bandas sirvió para que el Sevilla demostrara que es muy superior y Navas lo aprovechó nada más comenzar para adelantar a su equipo.

Casi, casi fue un error adelantarnos con tanta celeridad, ya que observando la falta de competitividad del rival, los nuestros se echaron a dormir y no mataron el partido cuando lo tenían tirado en el suelo e inconsciente. Bien pudo hacerlo Koné antes de lesionarse, pero está visto que por muchas oportunidades que le dé Jiménez, lo que a este muchacho le hace falta es un cambio de aires, y no sé si temporal o más bien definitivo. Luis Fabiano por su parte volvió a «deleitarnos» con una de sus espantadas. Cuando el equipo no está bien, el brasileño no es de esos que sabe tirar del carro y por el contrario se desespera ante los defensas rivales. De Negredo diremos simplemente que el juego como visitante le es mucho más propicio. Atrás, todo muy bien. Konko sabía que lo observaba un técnico de la selección francesa en la zona VIP aunque fue de más a menos. Los centrales, salvo alguna acción puntual, inquebrantables.

Eso sí, en la segunda parte no cambiamos la marcha y el Stuttgart sí lo hizo. Tal y como estaba todo, los alemanes tenían que jugársela a doble o nada porque se veían fuera de la Champions, mientras que nosotros mantuvimos la marcha y nos acabó costando caro. Los badeneses-wurtembergueses tuvieron claras ocasiones nada más comenzar, incluido un tiro al larguero. El Sevilla no daba sensación de poder sentenciar y lo peor llegó a doce del final con la lesión del recién salido Duscher. Con Perotti y Negredo también sustituidos, el equipo se veía obligado a jugar con diez ante un incisivo Stuttgart, que acabó encontrando premio en un disparo potente de Kuzmanovic que se cuela en la escuadra de Javi Varas. Por suerte, en esos momentos empataba el Unirea ante el Rangers, lo que nos daba la clasificación matemática para octavos. Para reservar la primera plaza bastará con empatar en Bucarest dentro de tres semanas.

El punto, aunque parezca poco, hace que los de Babbel dependan de sí mismos para meterse. Ganando en Glasgow y a los rumanos, este segundo partido en su campo, tendrán el pase. El 16 de marzo ya está marcado en nuestro calendario como fecha Champions. Esperemos que sea a domicilio.

Por el Sevilla FC jugaron: Javi Varas (2); Konko (2), Squillaci (3), Escudé (2), Navarro (2); Zokora (2), Romaric (1), Navas (2), Capel (2); Luis Fabiano (1) y Koné (1). También jugaron Negredo (1), Perotti (2) y Duscher (s.c).

Xerez CD 0; Sevilla FC 2. Sin fútbol pero sumando

Mal partido el que nos han ofrecido hoy Xerez y Sevilla. Nueva muestra del  fútbol control al que nos tenía acostumbrados el equipo la temporada pasada aunque con poca profundidad y escasas ocasiones. Una genialidad de Negredo y un gol de auténtico nueve de Luisfa rematado con una parada antológica de Javi Varas, nos han dado la victoria en un partido que prometía bastante más a priori. El pinchazo del Barça, que no ha podido pasar del empate en Pamplona, hace que la cabeza de la liga se compacte.

Jiménez ponía sobre el campo a un buen equipo a pesar de las bajas. Arriba, dos cracks como Negredo y Luis Fabiano. El centro del campo se le confiaba a Renato y Zokora. Por tanto se presuponía que el buen futbol debía aparecer sí o sí. Pues nada de eso; mucha lentitud, mucho pase horizontal, nada de juego por bandas y al margen del gol, una sola ocasión en cuarenta y cinco minutos. El protagonista, Negredo, que se saca de la chistera (nunca mejor dicho) un sombrerito al defensa y antes de que el balón toque el suelo, cabecea por encima de Renan que salía a la desesperada. Golazo del madrileño que transformaba la segunda ocasión que teníamos en cuarenta y dos minutos.

Tras el descanso, más de lo mismo; mucho control, nada de futbol y cero ocasiones por ambos bandos. El Xerez no se fue arriba hasta el último cuarto de hora. A cinco minutos para el final y con 0-1 en el marcador, Javi Varas hizo un paradón de dos puntos a remate de cabeza de un jugador xerecista. Jiménez, viendo que se le podía escapar el partido, sacó del campo a Negredo y metió a Duscher. Minutos más tarde se produce el cambio consabido de Capel por Perotti. Cuando peor lo estábamos pasando, el nueve de la canarinha recibe un pase interior de Navas y con un desmarque de lujo la cruza ante la salida de Renan. Ocasión casi idéntica a la que tuvo Capel frente al Espanyol pero con un final muy distinto. Y es que si frente a los periquitos hubiera estado el brasileño, estoy convencido de que hubiera transformado alguna de las muchas ocasiones que tuvímos.

Hoy no hemos disfrutado con el juego pero nos vamos más contentos que el dia del Espanyol. Diecinueve puntazos ya en nueve partidos y seguiremos terceros haga lo que haga el Valencia. El miércoles viene el Sttutgart frente al que tenemos que confirmar la primera plaza definitiva del grupo y así poder olvidarnos de la Champions hasta febrero para concentrarnos en Liga y Copa. Nos vemos para la crónica.

¡¡Ah, se me olvidaba!!; la otra noticia importante de la noche es que a pesar de pitarnos Bernardino Glez. Vazquez, hemos terminado con once. Y es que, como dijo Jimenez tras el partido de Riazor, todo el mundo nos trata ya como grandes.

Por el Sevilla FC jugaron: JaviVaras (3); Konko (1); Squillacci (2); Dragutinovic (2); Navarro (1) ; Renato (1); Zokora (2), Navas (1); Perotti (1), Luis Fabiano (2) y Negredo (3). En la segunda participaron Duscher (1); Capel (1) y Koné (s.c.)

VfB Stuttgart 1; Sevilla FC 3. Efectividad de sobra para sentenciar el pase

El Sevilla ha demostrado esta noche que ninguno de sus tres rivales del grupo G está a la altura del cabeza de serie, dejando visto para sentencia el pase para los octavos de final. Con tres partidos aún por delante, nos bastaría con un empate para hacer matemático lo que ya es más que virtual. La sorpresa la ha dado el Unirea, que ha goleado a un lamentable Rangers en Ibrox por 1-4 y se coloca segundo.

El comienzo no fue demasiado esperanzador, porque volvimos a ver a ese Sevilla reservón de antes de la racha de victorias. El Stuttgart, obligado por las circunstancias, lanzó un par de ataques en velocidad y lo pasamos bastante mal, aunque Javi Varas y en menor medida sus defensas consiguieron apaciguar las ansias alemanas. A la hora de salir a la contra, veíamos como un futbolista lo intentaba solo con el balón mientras sus compañeros parecían no tener fuerzas para acompañarle, por lo que fue complicado llegar hasta Lehmann en los primeros compases. El mayor susto de la primera parte llegó con un gol anulado a los locales por fuera de juego de Kuzmanovic, quien a pesar de no tocar el balón, estorbó a Varas en clara posición antirreglamentaria.

No llegábamos pero cuando lo hicimos no dudamos. Minuto 23 de juego y centro de Adriano al segundo palo, donde aparece Squillaci para cabecear inapelablemente al fondo de la red. El pase por alto del brasileño significó prácticamente el 80% de un gol que, si bien no hacía justicia al juego desplegado, significaba un importante logro de cara a la clasificación. El Stuttgart, algo superior a nosotros hasta entonces, no consiguió hilvanar apenas jugadas de peligro a partir de ese momento, a excepción de varias llegadas que deshizo bien Javi Varas. Lo único negativo fue la lesión de Adriano, que tuvo que dejar su puesto a Perotti en la banda izquierda.

La segunda parte no pintaba bien teniendo en cuenta lo visto durante los primeros cuarenta y cinco minutos. Jiménez se percató de la inferioridad de nuestro centro del campo y decidió sacrificar a Luis Fabiano para dar entrada a Duscher.  Lo acontecido después, dio la razón al técnico sevillista porque el equipo se adueñó de la zona ancha y pasó a tomar el mando de la situación. Este equipo tiene demasiada pegada como para aguantar un resultado y acabó goleando sin hacer prácticamente ruido. Un centro de Perotti desde el corner rebotado en un defensa complicó la vida a Lehmann, que dejó la pelota muerta para que Navas remachara en el área pequeña. Dos tiros a puerta y dos goles que dejaban el trabajo casi hecho. Pero es que todavía quedaba el tercero, de nuevo de cabeza y de nuevo de Squillaci, que aprovechaba, en fuera de juego, eso sí, un gran centro de Drago para ponerle el punto y final al partido. O casi, porque se hizo largo el resto del choque entre el golazo de falta de Elson y el empuje local con tiro al larguero incluido. Y es que los alemanes se quedan con dos puntos, a dos de la clasificación en estos momentos y con el handicap de visitar el Sánchez Pizjuán dentro de dos semanas.

Hemos vuelto a ver al Sevilla de Glasgow aunque con un rival algo más fuerte que sin embargo sólo inquietó al final, cuando lo tenía casi todo perdido. Urge la recuperación de Negredo porque Kanouté, como en La Coruña, estuvo desaparecido en combate y ya no atina ni en su especialidad, el uno contra uno. Muy seguro Javi Varas, que está aprovechando una oportunidad que tiene visos de alargarse por las complicaciones en la lesión de Palop. A ver si esto sirve para enderezar el rumbo en liga y seguir con el pleno de victorias en casa de esta temporada. En el plano económico, seguimos de enhorabuena. Tercer partido ganado en champions y otros 800.000 € para la caja. Si Jimenez y la plantilla llevan comisión por partidos ganados, se van a poner las botas.

Por el Sevilla FC jugaron: Javi Varas (2), Sergio Sánchez (2), Squillaci (3), Drago (2), Fernando Navarro (2), Lolo (2), Zokora (2), Navas (2), Adriano (1), Kanouté (0) y Luis Fabiano (1). También jugaron Perotti (1), Duscher (1) y Koné (s.c).

El «7» de España

Ni Raúl, como todavía algunos pasados de moda se empeñan en reclamar, ni el lesionado Villa que se tuvo que quedar en tierra. Hoy, sobre el césped del Republican Stadium de Yereván, el «7» de España ha sido Álvaro Negredo, 33º jugador sevillista en la historia que se coloca la casaca roja de la selección española. A decir verdad, el debut ha sido más significativo que espectacular, puesto que tanto el terreno de juego como el estilo de los armenios no eran los más propicios para ver lucirse al vallecano. Sea como fuere, Negredo ha hecho historia sevillista en los escasos dos meses que lleva en nuestro club.

Por cierto, tampoco le ha ido mal a Didier Zokora, que ha confirmado como capitán de Costa de Marfil el pase al Mundial de Sudáfrica con un triunfo ante la selección de Malawi. A ver como les va a los franceses, que ni dependen de ellos mismos para clasificarse. Todo hace indicar que acabarán necesitando la eliminatoria de repesca.

Athletic Club 0; Sevilla FC 4. ¿Quién marcaba hoy a Llorente?

Definitivamente Jimenez se ha quitado de encima los complejos. Ha planteado un partido valiente, confiando en las posibilidades de su equipo y olvidándose del Toquero de turno. En el último enfrentamiento entre vascos y sevillístas, el debate de la semana previa versaba sobre quien marcaría a Llorente. Huelga decir que el tiro salió por la mismísima culata. Esta tarde, el equipo saltó a por el partido desde el primer pitido de Teixeira. No se conformó con ningún resultado a pesar de ponerse por delante en el minuto 5. Siempre quiso más, y fruto de esa ambición cayeron otros tres. Y pudieron ser varios más si el tiro de Negredo a la media vuelta no se estrella en el larguero o el cabezazo de Squillacci a centro de Renato no hubiera conseguido atajarlo Iraizoz. Muy bien el Sevilla, dominando de cabo a rabo el partido. Y muy bien Manolo Jimenez. Nos ha demostrado que no hay nadie imprescindible en esta plantilla. La no convocatoria de Zokora, Perotti y Adriano levantó algunas reticencias pero ahí estaban Lolo, Capel y Navarro para alejar los fantasmas.

El Sevilla actual comienza a parecerse a aquel equipo ganador que tanto nos hizo disfrutar y en el que daba igual quién saliera porque se jugaba de memoria. Por estar, Jimenez ha estado bien hasta en las declaraciones pos-partido. Templado, con un análisis muy atinado de lo acontecido y sin sacar pecho. Nosotros que hemos sido críticos en muchas ocasiones con el juego del Sevilla y por ende con Jimenez, hoy tenemos que darle un diez en todo al de El Arahal. Al menos nos cabe la satisfacción de confirmar que estábamos en lo cierto cuando decíamos que este equipo tenía que soltarse y apostar por un juego mucho más ofensivo. Solo un dato; en seis partidos oficiales, catorce goles a favor y  tres en contra. Los números hablan.

En lo que a los jugadores se refiere, partidazo de Negredo. Marcó un gol de delantero centro nato y le dió otro a Jesús Navas. Muy bien de nuevo Renato. Se ha dedicado a desactivar las supuestas minas que poblaban el centro del campo y ha demostrado que el balón podía jugarse raseado. Incluso por el centro, mire usted. El tercer triunfador de la noche a mi juicio; Don Diego Capel. Ha vuelto por sus fueros en lo que a velocidad y desborde se refiere. Acabó con la paciencia de Amorebieta, al que provocó la primera tarjeta amarilla. No contento, el defensa karateka, volvió a dar un codazo a Negredo en el primer minuto de la reanudación que debió suponer la segunda amarilla y su expulsión fulminante. Teixeira se hizo el gallego a pesar de ser cántabro. Pero bueno, estaba ahí Jesusito Navas que en su enésima internada por banda se topaba con el torpe jugador vasco. Olvidándose de que ya tenía una amarilla, Amorebieta volvió a sacar a pasear el codo, Teixeira que lo ve y lo manda directamente a aplacar sus subidas de testosterona con una ducha fria.

A partir de aquí, el Sevilla empezó a pensar en Glasgow y puso el piloto automático. Se dedicó a tocar y tocar hasta aburrir a los decaidos felinos. Unicamente el cachorrillo Muniaín, última apuesta de Jokin Caparrós por la cantera, ponía algo de chispa en el Athletic pero sin llegar nunca a comprometer el resultado.

Magnifico partido el que hemos presenciado esta tarde. El buen juego acompaña a los buenos resultados y eso se refleja en el ánimo de los aficionados. Por cierto, ¿alguien ha caido en la cuenta de que llevamos ya un mes sin hablar del entrenador?

¡Que dure, que dure !

Jugaron: Palop (2), Sergio Sánchez (2), Squillaci (2), Dragutinovic (2), Navarro (2), Lolo (3), Renato (3), Navas (2), Capel (3), Kanouté (1) y Negredo (3). En la segunda participaron Luis Fabiano (2), Acosta (1) y José Carlos (s.c.).

Goles: 0-1; Renato. 0-2; Negredo. 0-3; Kanouté. 0-4; Navas.

¿Pero esto de qué va, por Dios?

Ayer lo vi de madrugada en un programa un poco friki, pero que al menos algo informa de la cadena Intereconomía y que dirige Josep Pedrerol. Pusieron unos cortes de una entrevista a Iturralde González y al gran Rafa Guerrero en la cadena local Bilbovisión. No tiene desperdicio ninguno ver a una persona que se supone que debe impartir justicia, se despache por las cadenas de televisión con esa actitud, por muy informal que sea el programa. El tío se presenta sentado a punto de caerse y con un gorrito que da a entender que acaba de llegar de fiesta. Y nada más y nada menos que nos pitará el domingo que viene (Canal Plus) en casa contra el Real Madrid. Casi nada.

Por si esto fuera poco, los de la LFP andan por China sopesando la idea de poner los partidos a las 3 de la tarde para que se adapten mejor al horario asiático. Así que un aficionado que lleva pagando su carnet la pila de años, resulta que ahora tiene que comer a las 12 de la mañana para que un chino no tenga que trasnochar. No sé que me parece más de vergüenza, si lo de Iturralde o lo de los chinos. Lo que me queda claro es que con este tipo de cosas jamás llegaremos al nivel de organización y seriedad de la liga inglesa, la mejor del mundo aun sin Cristianos, Messis ni Kakases.

Al menos, una noticia buena por Nervión, la de la indemnización del Ujfalusi (o bien del Atlético de Madrid por robárnoslo) que será de 875.000 euros. Viendo el nivel actual de Ujfalusi en el Manzanares y de su sustituto en el Sánchez Pizjuán, Squillaci, la verdad es que no podemos calificar la operación de otra forma que no sea: ¡Vaya chollo, señores!